El FBN II alcanza la máxima resistencia con la profundidad de anclaje estándar. Esto significa menos puntos de fijación y placas más pequeñas.
Si se utiliza la profundidad de anclaje reducida, se reduce la profundidad de perforación y se simplifica la instalación.
La rosca larga permite ajustes. Además, el FBN II también es adecuado para instalaciones descentradas. Esto aumenta la flexibilidad.
Montaje sencillo gracias al reducido número de golpes de martillo y al deslizamiento mínimo.
La parte saliente del vástago roscado protege la rosca contra daños. Esto ahorra tiempo durante el montaje y desmontaje.
El FBN II alcanza la máxima resistencia con la profundidad de anclaje estándar. Esto significa menos puntos de fijación y placas más pequeñas.
Si se utiliza la profundidad de anclaje reducida, se reduce la profundidad de perforación y se simplifica la instalación.
La rosca larga permite realizar ajustes. Además, el FBN II también es adecuado para instalaciones descentradas. Esto aumenta la flexibilidad.
Montaje sencillo gracias al reducido número de golpes de martillo y al deslizamiento mínimo.
La parte saliente del vástago roscado protege la rosca contra daños. Esto ahorra tiempo durante el montaje y desmontaje.
El fbn ii alcanza la máxima resistencia con la profundidad de anclaje estándar. Esto significa menos puntos de fijación y placas más pequeñas.
Si se utiliza la profundidad de anclaje reducida, se reduce la profundidad de perforación y se simplifica la instalación.
La rosca larga permite realizar ajustes. Además, el FBN II también es adecuado para instalaciones descentradas. Esto aumenta la flexibilidad.
Montaje sencillo gracias al reducido número de golpes de martillo y al deslizamiento mínimo.
La parte saliente del vástago roscado protege la rosca contra daños. Esto ahorra tiempo durante el montaje y desmontaje.